miércoles, 6 de marzo de 2013

Te doy la voz y la palabra



























Tal vez hoy sea un buen día para hacer un ejercicio de memoria y pensar en ti. 
No es que haya dejado de hacerlo, ni que el recuerdo sea menos intenso, es simplemente que un día, quizás, se enciende una luz que te indica que los recuerdos vienen y se instalan en tu memoria por alguna razón.

Seis años...pero la imagen de unos ojos que se apagan siempre permanece, y vuelve, de manera recurrente, para hacerme comprender que sí, que sigues a mi lado, y que lo harás siempre, porque esa mano que yo siempre he buscado es la tuya.

No necesito más palabras para que sepas, si puedes oírme, que cada día, y cada noche, y cada despertar te pertenecen, aunque pasen otros seis, o quince, o veinte años. Y que, si miro al horizonte, donde se intuye todo lo que es trascendente, aparece tu sonrisa, y hasta puedo oír cómo me dices muy bajito, desde aquella lejanía, que por fin sabes que todas nosotras estamos contentas. 

Y no te hará falta preguntarlo nunca más, si lo estamos es por tu recuerdo.

A la memoria de Santiago Cámara Pozuelo.